El
Propuesta didáctica
Esther Gutiérrez Quintana (UECE)
El modo verbal
¿Qué es el modo verbal? Alarcos Llorach lo define así (1995: 149): “Se suele distinguir entre el dictum (o contenido de lo que se comunica) y el modus (o manera de presentarlo según nuestra actitud psíquica). Los procedimientos gramaticales que denotan la actitud del hablante respecto de lo dicho, constituyen las variaciones morfemáticas del verbo conocidas como modos”. Por su parte, Gili Gaya (1961: 131) dice que “en toda oración podemos distinguir entre el contenido de la representación y la actitud del hablante ante dicho contenido: qué se dice y cómo se dice. Entre los medios gramaticales que denotan la actitud del hablante, se encuentran las formas de la conjugación conocidas con el nombre tradicional de modos. Con los modos expresamos nuestro punto de vista subjetivo de la acción verbal que enunciamos”. El modo es, por tanto, la categoría morfológica de la flexión del verbo que explica la actitud del hablante con respecto a la acción del mismo.
Pero, ¿cuántos modos hay realmente en español? El Esbozo (1991) propone la existencia de tres modos, el indicativo, el subjuntivo –que se divide en común y optativo- y el imperativo. En un pasado existía también el modo potencial, pero hoy en día no es muy aceptado por la RAE. Alarcos Llorach (1995: 154) distingue tres modos verbales, el indicativo, el subjuntivo y el condicional: “el indicativo (...) que es el modo de mayor amplitud de uso; designa la no-ficción de lo denotado por la raíz léxica del verbo, esto es, todo lo que el hablante estima real o cuya realidad o irrealidad no se cuestiona. El condicionado (llamado por lo común potencial o condicional) que designa los hechos aludidos por la raíz verbal como sometidos a factores varios que los harán posibles. El subjuntivo que es el modo de menor capacidad de aplicación y señala el carácter ficticio, no real, de lo que denota el significado de la raíz verbal”. En cuanto a las gramáticas más actuales, hemos seleccionado la Gramática didáctica del español de Gómez Torrego para conocer cómo trata la cuestión del modo verbal (1997: 142). Este autor propone también la división en tres modos verbales, indicativo, subjuntivo e imperativo: “el modo indicativo es el modo del que se vale el hablante para expresar contenidos o hechos reales u objetivos vistos por él como seguros”. Además de las varias gramáticas consultadas, hemos querido comprobar qué explicación puede encontrar un estudiante de español cuando recurre a un diccionario monolingüe. Según CLAVE, el Diccionario de uso del español actual existe el modo indicativo (el que indica que la acción expresada por el verbo se concibe como real y objetiva), el modo subjuntivo (el que indica que la acción expresada por el verbo se concibe como irreal, subjetiva o subordinada a otra acción) y el modo imperativo (el que expresa una orden un ruego o un mandato).
En definitiva, parece ser que la opinión más generalizada hoy en día es la de considerar tres modos en español: indicativo, subjuntivo e imperativo; por nuestra parte, no estamos tan convencidos de que el subjuntivo y el imperativo deban separarse, pero es cierto que, desde el punto de vista didáctico, esta división suele facilitar al alumno la comprensión y diferenciación de la función de cada modo verbal.
La enseñanza del subjuntivo
La enseñanza del subjuntivo es un argumento al que casi todos los profesores de E/LE tenemos que enfrentarnos antes o después, bien por una exigencia del programa bien por los propios contextos de comunicación que se nos presentan o porque los mismos estudiantes nos sugieren que abordemos el tema. Todos nos hemos planteado alguna vez cuestiones como ¿nuestros alumnos están lo suficientemente preparados para estudiar el subjuntivo?, ¿tengo que presentar todos los tiempos verbales que componen este modo?, ¿es necesario explicar cada uno de sus usos?, etc. A la hora de explicar los usos del subjuntivo es importante que tengamos en cuenta que hemos de explicarlo como un recurso más que nos ayude a comunicarnos de manera más adecuada y correcta. Por tanto, es necesario que cuando propongamos las explicaciones pertinentes y los ejercicios relacionados con ellas no perdamos nunca de vista los principios del enfoque comunicativo y que nos aseguremos de que las actividades estén contextualizadas y no sean, por ejemplo, meras listas de frases que completar mediante la tan explotada técnica del cloze. Debemos incorporar los contenidos relativos a los usos del subjuntivo de manera progresiva, sin exponer todos los casos y siguiendo una organización funcional que permita relacionar estos contenidos gramaticales con contenidos de naturaleza funcional y léxica.
Criterios para explicar el subjuntivo
El subjuntivo se puede explicar desde un punto de vista sintáctico, semántico, o incluso pragmático, pero ninguno de estos criterios explica por sí solo todos y cada uno de los usos del subjuntivo. Según el criterio sintáctico, los verbos en subjuntivo sólo pueden aparecer en las oraciones subordinadas, de hecho, se suele llamar el “modo de la subordinación”. El subjuntivo puede aparecer en oraciones subordinadas, dependiendo de un verbo subordinante, de un adjetivo, de un sustantivo o de una locución. En algunos casos, el subjuntivo puede aparecer en oraciones simples, por ejemplo, cuando se considera un imperativo (si no aceptamos la separación de ambos modos). Un ejemplo de explicación del subjuntivo siguiendo este criterio es la Gramática de español lengua extranjera de González Hermoso, que diferencia los valores del subjuntivo en oraciones independientes y en oraciones subordinadas.
Desde el criterio semántico, la actitud del hablante, también llamada modalidad por algunos autores, es una noción muy utilizada. Consiste en relacionar cada modalidad con un modo, así, cada modo verbal se usa para expresar diferentes modalidades.
Tradicionalmente, se relacionaban las modalidades afirmativa, negativa, interrogativa y exclamativa con el modo indicativo, las modalidades dubitativa, de posibilidad y optativa con el subjuntivo, y exhortativa con el imperativo. En los últimos estudios realizados sobre el subjuntivo, el indicativo se relaciona con la aserción (el hablante aserta, es decir, afirma o niega la verdad de lo que dice) y el subjuntivo con la no aserción. Además de los criterios sintáctico y semántico, existen dos criterios más para explicar el subjuntivo, el criterio sintáctico-semántico, puesto que los autores que defienden este criterio consideran que no se puede vaciar de contenido semántico la sintaxis. Y el criterio pragmático que toma como referencia la situación de comunicación en su totalidad. Así, la elección del subjuntivo tiene lugar por la intervención de factores contextuales. Con este criterio, se relaciona el subjuntivo con el concepto de información nueva y el indicativo con el concepto de información conocida. Pero no olvidemos que, por ejemplo, una estrategia discursiva del hablante es, la posibilidad de tratar la información compartida y conocida por el oyente como si fuera nueva con alguna intencionalidad, y viceversa, por eso será complicado afirmar si una información es de un modo u otro.
Pero, ¿cuál de estos criterios elegimos cuando tenemos que decidir cómo presentar estos contenidos en clase? No es aconsejable presentar el subjuntivo desde el punto de vista sintáctico, ya que nuestros alumnos no tienen por qué conocer argumentos relacionados con la sintaxis, pensemos por ejemplo en un curso de español en el que los alumnos son estudiantes universitarios de carreras científicas. En cuanto al criterio semántico, no es muy útil puesto que nuestros alumnos no han alcanzado un dominio adecuado de la lengua y el criterio pragmático resulta demasiado complicado.
En definitiva, podemos presentar los tiempos verbales de subjuntivo en la medida en que son necesarios para que los alumnos asimilen y se ejerciten en ciertas funciones comunicativas. Ya en el nivel inicial se estudian ciertas funciones que en estadios más avanzados podemos abordar sirviéndonos de algunos usos del modo subjuntivo.
El congiuntivo italiano
Cuando trabajamos con italianos nos encontramos con el problema de que tanto la lengua materna del estudiante como la lengua de estudio o lengua objeto, son dos lenguas romances que presentan grandes similitudes tanto en la gramática como en el léxico. Esta cercanía, por un lado, puede ser positiva para el estudiante a la hora de asimilar estos contenidos por la semejanza que presentan con su correspondiente en la lengua materna, como en el caso del modo congiuntivo. Por otro lado, esta misma similitud provoca que en los casos en los que los usos del subjuntivo son diferentes en ambas lenguas, se puedan producir casos de interferencias con la lengua materna, como la transferencia positiva o negativa. Por eso, a la hora de explicar el modo subjuntivo en el contexto didáctico es importante que programemos las actividades basándonos en las dificultades que conlleva dicha semejanza. Insistiremos en los usos que pueden dar lugar a confusiones por motivos interlingüísticos (por interferencia con la lengua materna) pero también prestaremos especial atención a los usos del subjuntivo más complejos por motivos de tipo intralingüístico (usos dificultosos por el propio funcionamiento interno que presenta la lengua meta). En cuanto a los usos diferentes en italiano, hay que tener en cuenta que son muchos los casos en los que en español es obligatorio el uso del subjuntivo y en italiano se usa el futuro simple de indicativo. Los casos son los siguientes:
Para expresar duda con forse: Forse verrà con me (tal vez venga conmigo), para expresar duda después de che interrogativo: non è arrivato. Che abbia la febbre? (no ha llegado, ¿tendá fiebre?), con la conjunción quando para indicar contemporaneidad en la acción o una presuposición que la que depende que la acción que expresa la oración principal se verifique: Quando arriverò, parleremo (cuando llegue hablaremos), con conjunciones temporales como finché, appena: Ti ricorderò finché vivrò (me acordaré de ti mientras viva), con la subordinada condicional introducida por se cuando la principal está también en futuro, en español el si condicional implica siempre el uso del indicativo: Se pioverà, andrò al cinema (si llueve, iré al cine), después de los verbos que indican voluntad, deseo, ruego y orden (por ejemplo proporre, sperare, pregare, ordinare, procurare di, sembrare di, decidere, etc.) en italiano se usa el infinitivo precedido de la preposición di, mientras que en español se usa el infinitivo sin preposición o el subjuntivo: Ti propongo di esaminare la questione (te propongo que examines la cuestión).
El infinitivo se usa también en italiano precedido de una preposición y un artículo, o de un artículo contracto, mientras que en español se omite el artículo y se usa otra forma: gerundio o subjuntivo precedido de cuando: Nello svolgere la tua attivitá, pensa nell’avvenire (cuando desarrolles tu actividad, piensa en el futuro), el subjuntivo se usa en las subordinadas como en español: después de las conjunciones de finalidad affinché, perché (para que), después de las conjunciones de oposición, de concesión sebbene, benché, quantunque (aunque), de restricción a meno che (a menos que, a no ser que) y senza che (sin que), de anterioridad prima che (antes de que) y de condición purché (con tal de que), a patto che, a condizione che (siempre que).
Se usa como en español después de los verbos impersonales que expresan un consejo, una obligación, una probabilidad, una posibilidad: è probabile che, bisogna, è necessario che... (es probabile, es necesario que, es preciso). Después de los verbos que expresan sentimientos como alegría o miedo, un disgusto o un deseo:
Mi auguro che tu venga a questa festa (espero que vengas a esta fiesta) y después del verbo sperare: spero che tu sia contento (espero que estés contento).
A diferencia del español, en italiano se usa el subjuntivo después de los verbos que indican una opinión personal, una impresión, una incertidumbre en forma afirmativa. Son los verbos pensare, credere, parere, sembrare, etc. Pero estos verbos pueden expresar también una incertidumbre, en cuyo caso se emplea el indicativo: Penso che sia sposato (creo que está casado). En italiano se usa el subjuntivo en las oraciones comparativas: È più difficile di quanto io non pensassi (es más difícil de lo que yo pensaba) y en las interrogativas indirectas: mi chiedevo perché non avesse fatto questo lavoro (me preguntaba por qué no había hecho este trabajo).
Propuesta didáctica: ejercicios
Es necesario precisar que no hemos tenido en cuenta todos los usos del subjuntivo, sino que presentamos algunas funciones comunicativas que un alumno de nivel intermedio debe conocer y en las que el subjuntivo es un contenido gramatical, junto con otros contenidos léxicos. Para programar estas actividades nos hemos valido de algunas gramáticas didácticas y de algunos manuales y otros materiales de E/LE, además de nuestra propia experiencia en el aula. De todas las funciones comunicativas en las que interviene el subjuntivo hemos utilizado dos criterios: hemos seleccionado las funciones más productivas y las que presentan mayores dificultades para los alumnos italianos. Por otro lado, estas actividades son adecuadas para un nivel intermedio, lo que implica que los estudiantes posean ya ciertos conocimientos ya asimilados en el nivel anterior, y que tendremos que tener en cuenta para presentar los contenidos nuevos. El nivel intermedio es el momento adecuado para consolidar lo ya aprendido y para proporcionar un mayor bagaje léxico y gramatical, como es el caso de algunos usos del subjuntivo, cuyo conocimiento ayudará a nuestros alumnos a comunicarse de forma más apropiada en un mayor número de contextos.
Para expresar duda, posibilidad y probabilidad
Un alumno que ha alcanzado un nivel intermedio sabe ya expresar duda, posibilidad o probabilidad por medio de ciertos recursos en indicativo, por ejemplo, mediante el futuro (llaman a la puerta, será tu amiga). Cuando se conocen estos usos podemos introducir formas como quizá o a lo mejor, que indican duda, que requerirán en algunos casos el modo indicativo y en otros el subjuntivo.
I. Explica cuáles serán vuestras costumbres en el futuro, usando expresiones de probabilidad o posibilidad. Coméntalo con tu compañero, ¿creéis que haréis las mismas cosas?
Ej. puede que viajemos en autobuses voladores, tal vez trabajemos menos,...
II. Lee este diálogo[1]:
Steven: Y tú, ¿por qué estudias español?
Liliane: Quizá porque en el futuro espero poder usar esta lengua en mi trabajo, ¿y tú?
Steven: Probablemente estudiaré turismo y por eso estoy aprendiéndolo.
Liliane: Por cierto, ¿vas a presentarte a los exámenes oficiales de español?
Steven: A lo mejor me presento en la próxima convocatoria, ¿y tú?
Liliane: Pues yo, es posible que me presente en la convocatoria de mayo. Espero aprobarlo.
Steven: Seguro que sí.
Liliane: Ojalá. Tal vez lo consiga
Ahora forma frases con las palabras en negrita:
Quizá.................................................................................................................
Probablemente..................................................................................................
Es probable que.................................................................................................
A lo mejor..........................................................................................................
Posiblemente.....................................................................................................
Es posible que...................................................................................................
Seguro que.........................................................................................................
III. ¿Qué sucedería si...? Por turnos vamos a formar frases como en los ejemplos:
Ej. ¿Qué sucedería si los días fuesen más largos?
-Si los días fuesen más largos, probablemente habría más horas de luz.
-Si hubiese más horas de luz, probablemente podríamos hacer mas cosas.
Para expresar deseos
En un primer nivel, los estudiantes han aprendido a expresar deseos utilizando el verbo querer con indicativo. Ahora debemos presentar este mismo verbo pero en la estructura: querer + que + presente de subjuntivo (quiero que vengas), junto con otros verbos como desear, esperar, etc. (deseo / espero que vengas). También podemos presentar algunas frases como ¡que descanses!, ¡que te diviertas!, en las que el verbo de deseo está omitido (¡deseo que te diviertas!), o recursos como ojalá que exige siempre el uso del subjuntivo (¡ojalá llueva pronto!)
I. ¿Qué le deseas a un amigo cuando te dice por ejemplo que se va de viaje al Caribe? Reacciona ante estas situaciones fijándote en el ejemplo.
Puedes usar expresiones como: ¡Que te diviertas!, ¡que te vaya bien!, ¡que descanses!, ¡que tengas suerte!, ¡que te mejores!, etc.
Tus padres a las once de la noche: Estamos muy cansados, nos vamos a la cama.
Tú:.....................................................................................................................
Un inmigrante que has conocido en la cola del INEM: ¡He encontrado un trabajo en Murcia!, ¡me traslado mañana!
Tú:.....................................................................................................................
Un amigo tuyo: ¿sabes que me caso y que me voy de luna de miel al Caribe?:
Tú:.....................................................................................................................
II. Imagina que estas paseando por la playa y, de repente, encuentras una lámpara como la de Aladino. Decides frotarla y aparece un genio que decide concederte diez deseos con la condición de que formules las frases usando el subjuntivo.
Ej. Quiero que el pelo se me vuelva rubio, deseo que no haya más guerras, me gustaría que los helados no engordasen, etc.
1) Quiero que ...................................................................................................
2) Quisiera que .................................................................................................
3) No me importaría que ..................................................................................
4) Deseo que no.................................................................................................
5) Sería feliz si ..................................................................................................
6) No quiero que................................................................................................
7) Desearía que ................................................................................................
8) Me gustaría que ...........................................................................................
9) Me haría feliz que ........................................................................................
10) Deseo que ...................................................................................................
III. Si te ofreciesen la posibilidad de entrevistarte con los representantes y dirigentes de todos los países, ¿qué te gustaría pedirles respecto a estos temas?
El ejército, el tabaco, las drogas, etc.
Ej. Me gustaría que el dinero estuviera mejor repartido.
Para expresar gustos y preferencias
Esta función se trabaja mucho en los primeros estadios lingüísticos sobre todo por medio del verbo gustar (me gusta / me gustan).. Esta función es muy productiva en los primeros intercambios comunicativos de nuestros estudiantes, por eso, es interesante que amplíen los recursos de que disponen. En primer lugar, necesitan conocer algunos cuantificadores que sirvan para indicar intensidad (mucho, muchísimo, bastante, poco, nada un montón, etc.) y algunos verbos que funcionan como el verbo gustar que ya conocen (interesar, divertir, entusiasmar, espantar, etc.) Ahora se podrán introducir algunas oraciones subordinadas sustantivas (me gusta que vengas a visitarme, prefiero que hoy no nos veamos, etc.) Haremos notar a nuestros alumnos que la estructura de estas oraciones se repite y les invitaremos a producir oraciones similares.
I. Tu compañero es un cantante famoso. Vas a entrevistarle para averiguar qué cosas le gustan y qué cosas detesta. Puedes hacerle preguntas como éstas:
-¿Te gusta que te pidan autógrafos?
-¿Te molesta que te paren por la calle para hablar contigo?
-¿Te importa que te comparen con otros cantantes?
III. Pregunta a tu compañero cuáles son las tres cosas que más le gustan y las tres que no soporta. Él hará lo mismo contigo. Después explicaréis al resto de la clase las respuestas del otro.
Ej.: Me gusta que me llamen mis amigos para salir por las noches.
A ...................................... lo que más le gusta es que ..................................., que ......................................... y que ..............................................................................
Para ordenar, aconsejar, sugerir
Son muchos los recursos que los alumnos han aprendido hasta ahora para poder dar órdenes e instrucciones, como algunos usos del imperativo, tener + que + infinitivo, hay + que + infinitivo, deber + infinitivo, presente de indicativo, etc. Ahora podremos introducir proposiciones con verbos propios de mandato y persuasión o influencia como mandar, ordenar, pedir, suplicar, rogar + que +subjuntivo (te pido / ruego /ordeno que vengas). Los verbos convencer y persuadir pueden tener un valor final que obliga al uso del subjuntivo en la oración subordinada (me convenció para que fuera), cuando en la subordinada el sujeto el diferente que en la principal. Para aconsejar y sugerir nuestros alumnos pueden conocer ya construcciones como yo que tú, yo en tu lugar + condicional, etc. Podremos presentar en el nivel intermedio la estructura es / parece + adjetivo + que + subjuntivo (es conveniente / recomendable / importante que lo hagas).
I. Imagina que trabajas en un hospital como enfermera y tus pacientes te cuentan sus síntomas. Aconséjales usando el presente e imperfecto de subjuntivo:
Paciente 1: “tengo fiebre, estornudo continuamente, tengo dolor de cabeza y de garganta y me dan escalofríos”.
Es conveniente que ..........................................................................................
Sería conveniente que ......................................................................................
Paciente 2: “me duele el estómago, vomito después de comer y estoy muy pálido”.
Es recomendable que ......................................................................................
Sería recomendable que ..................................................................................
Paciente 3: “me duelen mucho los riñones y la espalda, tengo problemas al hacer pis"
Es importante que ...........................................................................................
Sería importante que .......................................................................................
Paciente 4: “me he caído por las escaleras esta mañana, se me ha hinchado el tobillo y me duele mucho cuando lo muevo”
Es aconsejable que ..........................................................................................
Sería aconsejable que ......................................................................................
II. Trabajas en la Dirección General de Tráfico y tienes que preparar un cartel para la nueva campaña de prevención de accidentes. Puedes usar frases parecidas a las siguientes:
Es aconsejable que revise su coche antes de hacer un viaje largo, es preferible que no corra, es importante que se abroche siempre el cinturón de seguridad, no debe conducir cuando tiene sueño, etc.
Para opinar y valorar
En el nivel inicial nuestros alumnos han aprendido a expresar su propia opinión mediante los verbos creer, pensar, parecer, etc. o mediante otros recursos habituales como las expresiones para mí, en mi opinión, desde mi punto de vista, etc. En el nivel intermedio presentaremos otras posibilidades de uso, por ejemplo, la introducción de las partículas negativas ante el verbo de opinión en la oración principal, que implica el uso obligatorio del subjuntivo (no creo que sepa mucho de economía) y en la subordinada, que requiere el uso del indicativo (creo que no sabe mucho de economía). Esta regla podrá ser ampliada en otros contextos con diferentes tipos de verbos, por ejemplo, los verbos de percepción como ver, sentir, notar, etc.
Algo similar sucede en la expresión de las valoraciones por parte del hablante, por medio de las impersonales, cuando enunciamos dichas valoraciones de forma negativa: es cierto / evidente / obvio / verdad /seguro + que + indicativo (es cierto que estudia en esa escuela) frente a no es cierto / evidente / obvio / verdad /seguro + que + subjuntivo (no es cierto que estudie en esa escuela). Lo mismo ocurre con el verbo estar: está claro + que + indicativo (está claro que estudia en esa escuela) frente a no está claro + que + subjuntivo (no está claro que estudie en esa escuela). El verbo parecer se usa en este caso como el verbo ser, y pueden aparecer acompañados por un sustantivo (una maravilla, una pena, una sorpresa, una lata, etc.) o adjetivos (dudoso, increíble, fantástico, maravilloso, extraño, imposible, etc.) que pueden estar acompañados a su vez por algunos intensificadores (realmente, muy, bastante, etc.)
Por último, una estructura que podemos presentar a nuestros estudiantes es una variante con el artículo neutro: lo + adjetivo + es + que +subjuntivo (lo importante es que venga a vernos).
I. ¿Qué opinas sobre estas cuestiones? Da tu punto de vista usando yo creo / no creo que, a mí me parece / no me parece que, etc.
Hoy en día el paro es uno de los mayores problemas para los jóvenes.
Las guerras son muy importantes para mantener la seguridad mundial.
Si no existiera la publicidad, se consumiría mucho menos.
Las mujeres son más inteligentes que los hombres.
II. La isla de Catapulta es un lugar perdido en el que las costumbres son un poco diferentes. Da tu opinión sobre algunos aspectos que te parezcan curiosos.
En Catapulta la gente vive en casas hechas enteramente con latas de Coco-Cola recicladas. Se visten sólo con colores claros y no usan jamás el rojo, ya que es una isla llena de vacas y bueyes. Los catapultenses comen sólo carne y embutidos, excepto los pescadores, que se alimentan de langostas y langostinos. En Catapulta no se trabaja jamás porque su religión lo prohibe, sólo los pescadores trabajan. Además, en la isla no hay electricidad y por las noches todos salen con una vela encendida para poder reconocer a los demás. Los habitantes de Catapulta son bastante felices, duermen más de diez horas al día y toman el sol y se bañan en la playa cuando quieren.
Bibliografía
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[1]
Ejercicio adaptado de ROLLÁN DE